Hoy, mientras iba a trabajar, noté que en la calle -a una cuadra del restaurante- había un charco de agua.
Siete horas después salí del trabajo y caminé por esa misma calle. El charco de agua era, entonces, hielo.
Pescar gente, cuando hace 15 grados bajo cero, es bastante complicado.
1 comentario:
A veces cuando llueve parece que regaran el suelo de espejos
Publicar un comentario